Tanto el heno como el musgo, forman parte de las especies vegetales que ayudan a mantener el equilibrio en los bosques. En temporada navideña, los encontramos comúnmente en el mercado por el uso que se les da a ambos en la decoración propia de estas fechas (hogares, comercios, zonas públicas y centros de trabajo).

Este tip va dirigido a todo el que busque consumir de manera responsable, puesto que trata sobre cuestionarse las razones por las que compramos lo que compramos y qué efectos tiene nuestra manera de consumir.

El heno es una especie vegetal que encontramos en zonas boscosas, cuyo papel incluye la disminución de contaminación ambiental, retención de humedad y protección de fauna silvestre.

Los musgos por su parte, son plantas, muchas veces endémicas de México, que albergan una gran variedad de organismos y microorganismos cuyas funciones mantienen sanos los ecosistemas naturales. Ayudan también a infiltrar el agua en los suelos, a prevenir su erosión y favorecen la germinación de semillas.

La desinformación y el desinterés por conocer de dónde se obtienen ambos elementos, ha dado lugar a que persistan las malas prácticas de extracción de este par especies vegetales, las cuales siguen siendo muy populares y demandadas por una gran parte del sector poblacional de nuestro país.

Por ende, progea te invita a cuestionar tu consumo y a hacerlo de manera responsable, es decir, comprar únicamente lo que se utilizará, si es verdaderamente necesario y una vez que se le haya dado un primer uso, buscar la forma de darle una segunda oportunidad a aquello que reste, ya sea en composta, acolchados naturales u otra alternativa que favorezca al medio ambiente y a sus especies.

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